La trufa negra (Tuber melanosporum) es uno de los manjares más exclusivos, tanto en las más prestigiosas cocinas como en los menús elaborados en casa.
La llegada del invierno es sinónimo de la aparición de este preciado hongo y la elaboración de los mejores y más deliciosos platos con trufa.
Fuera de temporada, las trufas en conserva son un fantástico recurso para seguir disfrutando de la joya negra de la gastronomía.
La versatilidad y las particularidades de la trufa negra la convierten en el ingrediente estrella para dar a cualquier plato, por sencillo o elaborado que sea, un toque especial y una combinación de aromas y sabores que lo catapultarán a la excelencia.
Hoy vamos a proponerte algunas ideas para elaborar deliciosos platos con trufa. Aquí encontrarás sabrosas recetas clásicas con trufa negra e ideas de platos con trufa originales y fáciles de hacer.
Platos clásicos con trufa negra
La trufa negra, Tuber melanosporum, permite crear todo tipo de platos.
Desde aperitivos o entrantes hasta platos principales y postres (sí, ¡postres!) pasando por primeros platos y acompañamientos, esta joya culinaria es el ingrediente perfecto para combinar con cualquier menú.
La trufa negra, Tuber melanosporum, tiene fama de acompañante perfecto para platos elaborados con carnes o elementos grasos como foie, guisos, arroces o huevos.
Valiosa y de alto valor, la trufa aporta un sabor y un aroma inconfundibles a cualquier plato, convirtiendo un sencillo alimento como el huevo en una demostración gastronómica de potencial organoléptico.
Si hay un clásico en platos con trufa, este es, sin duda, el maridaje entre los huevos y la trufa negra. Sin embargo, este tipo de elaboraciones no son los únicos platos con trufa con los que elaborar ideas sorprendentes.
Huevos fritos con trufa negra
Nada más sencillo que aromatizar unos deliciosos y sencillos huevos fritos con uno de los ingredientes más amado por sus particularidades, la trufa negra o Tuber melanosporum.
Cocinar unos huevos fritos con trufa negra es tan sencillo como introducir los huevos en un recipiente de cristal hermético con un ejemplar de trufa negra durante, al menos, 24h (puedes comprar huevos trufados aquí directamente). El diamante negro de la gastronomía aportará a este alimento un sabor inconfundible.
Y para los amantes de los sabores intensos, qué mejor que laminar trufa negra sobre los huevos fritos y disfrutar de una combinación de sabor y aroma deliciosa.
Platos con trufa negra y huevo
Si te apetece probar una versión más elaborada con una combinación de sabores muy interesante, te proponemos dos de los platos con trufa más clásicos y sorprendentes.
Huevos cocotte con trufa negra
Los huevos en cocotte no pueden ser más sencillos. Una de las formas más fáciles de hacerlos consiste en pochar un poco de cebolleta, ajo, tomate pelado, tomillo, orégano y sal, hacer un nido con esta elaboración en un recipiente y romper un huevo en el hueco.
A continuación, basta con espolvorear con queso de cabra y hornear unos 10-15 minutos al baño María. Servir con trufa rallada por encima y… ¡disfrutar!
Tortilla española con trufa negra
Otra idea es realizar una tortilla con trufa negra. La elaboración es similar a la tortilla española, pero añadiendo un chorro de leche, unas gotas de limón y trufa negra rallada a la mezcla antes de pasarla por la sartén.
Pasta y trufa negra, la combinación perfecta
La trufa negra es muy utilizada en la cocina italiana, de ahí que la combinación de trufa negra y pasta sea uno de los platos con trufa más clásicos y tradicionales.
Usar pasta fresca y rallar la trufa en el momento justo de servir la elaboración son dos trucos muy sencillos para cocinar las mejores especialidades italianas de la mano de la joya negra de la gastronomía.
Y ya que hablamos de pasta italiana, qué menos que una sugerencia gastronómica típica de la mismísima cocina piamontesa. Un plato con trufa clásico y sencillo, pero con un sabor exquisito. Su elaboración es tremendamente simple: cocer pasta fresca al huevo, saltearla con una nuez de mantequilla y espolvorear con trufa negra en el momento del emplatado. Fácil y delicioso.
Arroz y trufa, ejemplo de versatilidad
De todos los platos con trufa, las elaboraciones con arroz permiten hacer magia gastronómica. Elaborar un risotto con trufas será una experiencia culinaria en la que participarán todos los sentidos.
El secreto para preparar un plato con trufa delicioso con base de arroz es elaborar un caldo de verduras poco condimentado e incorporar un queso parmesano suave que no enmascaren el sabor y el olor de la trufa.
Risotto de trufa negra
Saltear 250 gr de arroz para risotto (con un Carnaroli triunfarás, pero hay muchos otros tipos muy recomendables) con 1 chalota bien picadita, agregar medio vaso de vino blanco seco e incorporar poco a poco 1 litro de caldo de verduras mientras se remueve.
Agregar 100 gr de trufa negra, Tuber melanosporum, cuando queden 5 minutos para que la elaboración esté lista, añadiendo 1 cucharada de mantequilla y queso parmesano al gusto y dejando que se cocine todo tapado a fuego bajo.
Truficonsejo: servir con un chorrito de AOVE y trufa negra rallada al emplatar. Y recuerda que son los comensales los que esperan por el risotto y no al revés. ¡Disfruta de un plato estupendo con un sabor inigualable!
La trufa negra, Tuber melanosporum, acompaña deliciosamente a un gran número de platos. Basta con laminarla sobre unas tostas de pan con AOVE (o usar aceite con trufa) o incorporarla a platos de pasta, arroz, patatas, huevos o verduras.
Unas simples escamas de este delicioso ingrediente darán un protagonismo inigualable a todos tus platos con trufa. Prueba a incorporarlas a una hamburguesa con queso raclette o a cocinar unas deliciosas vieiras asadas con puré de trufa negra.
Platos con trufa negra, la sorpresa de la innovación
La trufa negra puede sorprender y sorprende combinada con alimentos tan variopintos como verduras, mariscos, pescados o ingredientes dulces.
No te conformes con disfrutar de unos sabrosos huevos trufados o la melosidad de un arroz con trufa.
A continuación, te proponemos algunas sugerencias para cocinar platos con trufa sorprendentes con una sencilla elaboración y un resultado espectacular.
Cebollas rellenas con trufa negra
Este delicioso aperitivo no puede ser más sencillo de cocinar. Empieza hirviendo 150 gr de patatas y partiendo un par de cebollas medianas por la mitad para retirar y reservar su parte interior, horneando los bordes con sal y pimienta.
Prepara un relleno con el resto de la cebolla picada y un poco de romero, mezclando la elaboración con 10 gr de trufa negra rallada, 50 gr de parmesano, una yema de huevo, sal y pimienta.
Incorporar la mezcla a las cebollas asadas y hornear, emplatando con hojuelas de trufa negra al gusto. Te sorprenderá la mezcla de sabores a tierra y la dulzura de la cebolla.
Platos de pescado con trufa negra
¿Has probado la combinación de la trufa negra, Tuber melanosporum, con un delicioso pescado?
Un lenguado a la mantequilla y trufa negra acompañado por brotes y manzana roja será una buena iniciación. ¿Suena complicado? ¡En absoluto!
Marca el lenguado limpio con un poco de mantequilla en una sartén y reserva. Sobre sus jugos, añade harina, vino blanco, caldo, sal y medio limón exprimido hasta que rompa a hervir un par de veces. Incorpora la trufa picada sobre la elaboración.
Hervir los brotes y sofreírlos con una manzana roja cortada en taquitos como acompañamiento para el pescado y la salsa.
Truficonsejo: añade unas patatas cocidas al plato y vierte la mantequilla resultante de preparar los lenguados sobre ellas. La combinación de sabores será un espectáculo gastronómico que no te puedes perder.
¿Te hemos dado suficientes ideas? Solo queda una cosa… delantal y ¡manos a la obra!